por Francisca Torres | May 24, 2016 | Casos |
A Heather Goddard se le caen las lágrimas cuando tiene que hablar de Clover, una hermosa pewita rescatada que tenía hace 8 años murió de cáncer al pulmón.
Un día de paseo, fumando como siempre, Heather se dio cuenta que Clover no lo estaba pasando bien, a sí que fue al veterinario inmediatamente… Después del chequeo inicial vinieron los rayos X que le hicieron darse cuenta del gran error de su vida: fumar no sólamente le hacía daño a ella (que esa era su opción) sino también a los que la rodeaban..
La pequeña Clover tenía puntos oscuros en sus pulmones que solamente indicaban una cosa: Cáncer.
La inhalación diaria de los tóxicos contaminantes del cigarro que se fumaba su humana habrían terminado con su bienestar y con su vida…
«Fue un momento muy duro, pero la pérdida de Clover con cáncer al pulmón por estar cerca de quien fuma sólo muestra que la inhalación del humo de otro ser (fumador pasivo) ya es lo suficientemente dañino».
Muchas veces nos preocupamos de no fumar cerca de niños, pero al final de cuenta, los Pewos y otros animales domésticos están más propensos a sufrir las enfermedades desencadenadas por el consumo de cigarro…. Sin poder hacer nada para evitarlo. 🙁
Si conoce a alguien que fuma y tiene pewos, hágale llegar esta historia. Podría ser la diferencia entre la vid y la muerte de su peludo
por Francisca Torres | May 20, 2016 | Casos |
Se queda mi esperanza de que vuelvas pronto, que todos esos momentos felices no pasen a ser parte de un recuerdo…
Se queda la desesperación de no saber donde estoy ni cuando volveré al lugar que contigo construí como mi hogar…
Se queda mi corazón destrozado al saber que ahora soy uno más de todos esos Pewos que alguna vez ví en la calle cuando caminabamos juntos…
Se queda el miedo en mi corazón al saber que ahora todas las noches tengo que pasarlas solo… con frio y con temor a otros humanos que no fueron tan bondadosos como tú…
Se queda el estómago vacío, ya que nunca aprendí a buscar comida en la basura. Tu eras el que siempre me llenaba mi platito el cual yo me comía con tanta felicidad.
Se queda la desesperanza, al darme cuenta que yo solamente era un accesorio para tí.
Se queda un corazón roto… Al darme cuenta que tú no me amabas como yo a tí… 🙁
Por Francisca L. Torres.
por Francisca Torres | May 20, 2016 | Casos |
Yo te esperaré siempre… Porque sé que tu me amas. Lo ví en tus ojos, en nuestro último paseo, mientras me mirabas y anudabas esa cuerda al árbol.. lo ví en tus ojos mientras me mirabas por el espejo retrovisor cuando te alejabas… Lo sentí cuando ya no te ví más y me quedé solo esperando.
Me amabas? O es que yo te amaba tanto a tí que ví eso?
Me amabas y me convertí en un problema para tí…?
O nunca me amaste y me hiciste llenarme de ilusiones de quedarme la vida entera contigo?
De lanwetear cada día una de tus manos y salir a pasear como otros Pewos salen con sus humanos?
Me amaste y el costo de la vida es muy alto y no te alcanzaba para mi alimento.. o mi atención veterinaria… o para pagar el dolor que tiene mi corazón?
Tal vez no me amabas… Tal vez me equivoqué.
Pero yo nunca dejaré de amarte. Tú serás la razón de mi existencia.
Y estos días… de que yo sea invisible.
De mi muerte invisible.
por Francisca Torres | Abr 21, 2016 | Casos |
Mi pewo no es mi hijo. Lo sé. Estoy harta de oír a gente que diga “como no tienes hijos, tu pewo es como tu hijo” o “tratas al pewo como un hijo y no lo es”…
Sé que NO ES MI HIJO, es MI PEWO. No soy madre, no lo soy, pero tengo claro que el sentimiento de una madre a un hijo no se puede igualar y no puedo imaginar cómo será…
Tengo un pewo, un pewo al que adoro sí, pero es un pewo. A diferencia de un hijo, mi pewo nunca se hará mayor mentalmente, no se irá de casa o me cuidará cuando sea viejita. No se hará independiente ni válido por si mismo: siempre me va a necesitar para poder comer, beber o simplemente hacer deporte.
Nunca será adolescente y como además, tampoco hablará no escucharé nunca frases típicas de un hijo/a quinceañero/a deslengüado/a como “problema tuyo”, “tú es que no me entiendes”, “que pesada eres”, “no tienes ni idea”. Al igual que esas cosas, tampoco oiré un “te quiero”, “gracias”, “te necesito”…
No me juzgará, ni me cuestionará mis ideas o mis decisiones. No me pedirá una PLAY, un juguete, un capricho…
A diferencia de un hijo, nunca veré parte de mí en mi pewo: ni física ni psicológicamente, es decir, no veré un legado. Veré a mi pewo crecer tanto que le veré envejecer, y no él a mí como lo haría un hijo. No sólo seré quien le cuide sino seré quien le vea irse para siempre, así, de manera natural y no por una desgracia de la vida. Simplemente, ese será nuestro destino.
Mi pewito es un animal, no una persona, y tampoco es mi hijo. Sin embargo, yo sí soy su madre. ¿Irónico? ¿Cómo puede ser? Creo que ha quedado claro lo que es un hijo, pero… ¿una madre? ¿Qué crees que es una madre? Para mí, una madre es alguien que se sacrifica por sus hijos, cuida de ellos, cambia su vida para el bienestar de su familia. Una madre mima, educa y quiere incondicionalmente siempre. Por todo esto, mi pewo no es mi hijo, pero yo sí soy su madre.
Soy todo lo que tiene, no soy su líder de la manada, no soy su ama, ni dueña. Para él soy parte de su familia, de lo que para un pewo es un su familia. De lo que para mí es una familia.
Me da pena esos que no lo entienden porque jamás sabrán lo que es sentir el amor de un ser que no habla, que no madura, que no se expresa como un humano… No podrán tener lo que yo tengo al observar esa mirada con la que mi pewo me lo dice todo.
Mi pewo no es mi hijo, pero yo soy su madre, gracias a mí, tiene una vida plena, sana y que con tan poco es feliz y no te exige nada más. A cambio de lo que para un humano es apenas nada, tú eres su todo.
Madre-hijo es una conexión natural, que sale sola y que es inigualable seguro. Pero la conexión con un animal no lo es, no todo el mundo puede acceder a esa sensación tan maravillosa.
Sólo espero que los hijos de esas personas que no entienden lo que yo siento y que no comprenden la importancia de un animal para algunas personas, que sus hijos, tengan un animal (ya sea pewo, gato, caballo…) y puedan obtener esa conexión que yo tengo con mi pewito. ❤😍
por Francisca Torres | Abr 21, 2016 | Casos |
«Me hubiera muerto ese día si no fuera por tí. Yo hubiera renunciado a la vida, si no fuera por tus ojos de mirada amable. Yo hubiera usado mis dientes en el temor, de no ser por tus manos suaves. Me han dejado en esta vida creyendo que a todos los seres humanos no les importo. Solo quería una cama para dormir, alguien que me ame y me lo demuestre, y yo demostrarlo porque tengo mucho para dar… tus dulces ojos, tu sonrisa, tu amor, tus manos suaves, tu gran corazón me salvo.
Tu me salvaste del terror calmando los recuerdos de mi antigua vida. Tu me has enseñado lo que significa ser amado. Te he visto hacer lo mismo con otros perros como yo. He oído que tu te preguntes en tiempos de desesperación … ¿Por que lo haces? Cuando no hay más dinero, más espacio, no hay más viviendas. Abres tu corazon un poco mas grande, estiras el dinero, un poco más apretados, solo para salvar a uno más.. parecidos a mi. Te lo digo con la gratitud y el amor que brilla en mis ojos. Es la mejor manera que se. Recordando por qué hay que seguir intentandolo.
Yo soy la razón. Los Pewos delante de mí son la razón. Como son los que vienen después. Muchas vidas se han perdido. ¡Y muchas más pueden ser salvadas!
RECUERDEN QUE NUESTRO AMOR NUNCA SE VA.
Me iba a morir si no fuera por ti».
por Francisca Torres | Feb 22, 2016 | Casos |
Desde que nuestro pewito murió en Abril, hemos estado escribiendo ocasionalmente cartas con mi hijo de 3 años Luke. En la noche, nos sentamos en la mesa de la cocina y Luke me dice que es lo que le quiere decir y yo lo escribo. Y como sabrán, es muy difícil engañar a un niño de 3 años, entonces dejamos la carta en el correo, usualmente con la dirección: Moe Westbrook, Paraíso Pewuno, Nube 1″.
Una noche, hace unas dos semanas atrás, olvidé sacar la carta de las que iban al correo mientras Luke dormía. Al día siguiente, se había ido. Asumí que el oficial de correos la tiraría a la basura o que por lo menos alguien se reiría de aquello. Pero no fue así, esta mañana, una nota sin estampilla apareció en nuestro buzón de correos. El remitente decía “De Moe”. La amabilidad de un extraño me sobrecogió. Le daré la nota a Luke por la noche, pero la mantengo en mi escritorio ahora. Moe es un pewo que estuvo en mi vida por 13 años y hizo que las cosas el último tiempo se convirtieran en algo más complicado y con mal olor, pero también, en algo maravilloso. Lo extraño cada día de mi vida. Recibir la nota me recuerda que hay personas con un gran corazón y el tremendo impacto que un pequeño gesto puede tener en la vida de otros.
Gracias a Moe, a los Pewos y a todos los trabajadores del correo en todo el mundo.
Son los detalles los que los hacen grandes <3
