La historia de «Thor» y «Margarita» en Aduanas: De pewos vagabundos a finos detectores de drogas y explosivos
Ambos canes fueron rescatados desde las calles donde vivían en pésimas condiciones. Ahora sirven a una institución donde se les brinda cuidados, cariño, y pueden desarrollar sus aptitudes animales al servicio de la sociedad.

«Thor» vagaba por la playa Chinchorro lleno de sarna y garrapatas. «Margarita» pululaba por el centro de Arica buscando comida en basureros y dormía bajo una locomotora. Hoy sus vidas son totalmente distintas y lucen con orgullo las capas del Servicio Nacional de Aduanas que los identifican como canes detectores de drogas y explosivos.
La historia de ambos ejemplares se remonta al año 2014 cuando la ingeniera civil industrial Katherine Donoso (33) se encontró en el centro de Arica con «Margarita», quien estaba preñada y lucía llagas en su piel debido a la sarna.

En varias oportunidades intentó atraparla para brindarle atención médica, pero la perrita huía raudamente entre autos y calles. Fue así como se contactó con un grupo de jóvenes de la Agrupación Oasis y lograron capturarla, tras lo cual la sometieron a cuidados especiales hasta que dio a luz 8 cachorros. «Todos los cachorros fueron entregados en adopción y me quedé con Margarita durante más de un año. Nadie la quería adoptar porque era grande e inquieta hasta que nos contactamos con funcionarios de Aduanas. Ellos vinieron a mi casa a evaluar a otro perrito que se llamaba Tonino y al final los aduaneros se llevaron a Tonino y Margarita».

La historia de «Thor» es similar. Una joven de la Agrupación Resiliencia Animal lo encontró en muy malas condiciones en playa Chinchorro y Katherine lo adoptó.

«Pensábamos que era adulto porque tenía callosidades en la piel, pero al final resultó ser un cachorro con una energía increíble», recuerda la animalista, quien agrega que «ambos eran muy inquietos y por lo mismo la gente no los quería adoptar y lo más probable es que los hubieran abandonados nuevamente. Por eso me alegra que hoy estén sanos, bien cuidados y prestando labores en Aduanas».

En la recuperación de ambos canes también ayudó la veterinaria Ana Campos. «Ambos fueron rescatados con Sarna Sarcoptica y eran portadores de Erlichia Canis», recuerda la profesional, quien agrega que se les trató con vacunas, ungüentos y una serie de medicamentos. Una vez que estuvieron sanos fueron llevados hasta los caniles de Aduanas y entrenados con éxito.

El Director Regional de la Aduana de Arica, Emilio Araya Ramírez, señala que se estima que Thor nació en diciembre de 2013 y Margarita en mayo de 2012. Ambos fueron evaluados por guías caninos y entrenados en Arica, siendo licenciados el año pasado. «Son dos ejemplares muy activos y efectivos al momento de buscar sustancias prohibidas. Tienen una buena relación con los pasajeros y son cariñosos con los niños. Ellos son una demostración que la suma de buenas voluntades puede recuperar a ejemplares que de lo contrario estarían abandonados», agrega el Director.

El guía canino Segismundo Jara explica que «Thor» está entrenado para la búsqueda activa de todo tipo de narcóticos, sumando hasta el momento más de 150 kilos en decomisos de distintas sustancias. «El caso más llamativo fue cuando sorprendió a un grupo de falsos motoqueros colombianos, quienes traían sus máquinas con droga entre los perfiles metálicos y la ropa. Revisa con mucha energía en todos los rincones de los buses y salta con gran entusiasmo sobre los camiones. Es muy fiel y cariñoso».

En tanto, «Margarita» está entrenada en detección de drogas, armas y pólvora, «por lo tanto su tipo de alerta es pasiva, es decir, después de la detección se sienta, a diferencia de Thor que su hallazgo lo anuncia rasguñando el lugar. Esto permite que Margarita pueda revisar personas y ante una amenaza de arma o pólvora evite el contacto directo», agrega Jara.

El ex encargado de la Escuela Canina de Arica, el fiscalizador aduanero Marcelo Arévalo, explica que entre los años 2000 y 2015 recibieron 86 perros callejeros para ser evaluados, de ellos cerca del 50% ingresó al Servicio, destacando el caso del emblemático «Kepper», que era de un militar que fue destinado a Irak y no tenía con quien dejarlo y lo donó a Aduana. «Kepper se transformó en el mejor perro antidrogas en la historia de la Aduana chilena, con más de 800 procedimientos y más de 4 toneladas incautadas de distintos tipos de droga. Sus pasos ahora los siguen Thor y Margarita», complementa el Director Emilio Araya.

Respecto al éxito de los perros callejeros, Araya señala que la situación se explica porque este tipo de ejemplares debe sobrevivir esquivando autos y personas, por lo tanto se adaptan de mejor forma al trabajo en avanzadas y complejos fronterizos. Asimismo, el hecho de buscar su comida mediante el rastreo y olfato desarrolla sus condiciones naturales, «por lo tanto el entrenamiento sólo viene a potenciar esas habilidades y se les incorpora la búsqueda con una recompensa que es el juego. Además reciben cuidados y alimentos especiales, los que sumado al cariño que reciben, los hace muy efectivos».

error: Pewo que ladra no muerde!